Tras las protestas por el aniversario de la muerte de Mahsa Amini, la represión se ha recrudecido
La ONG Hengaw denunció que una adolescente de 16 años está en coma después de enfrentarse a la Policía de la Moral por no llevar bien el velo, en el marco de un endurecimiento de la obligatoriedad de esta prenda islámica tras las protestas antigubernamentales que estallaron a raíz de la muerte de la joven kurda Mahsa Amini.
Armita Garawand, residente en Teherán, se encontraba en la estación Shohada del metro de la capital iraní cuando fue atacada por miembros de la Policía de la Moral, el organismo encargado de velar por el “correcto cumplimiento” de la vestimenta islámica.
“Todos los medios de comunicación del Estado han negado sistemáticamente la agresión contra esta joven y los funcionarios del Gobierno han afirmado que no ha ocurrido ningún ataque físico. Estas afirmaciones se basan únicamente en un pequeño vídeo recortado desde un ángulo exterior del tren”, resaltó Hengaw.
Debido a las heridas, la adolescente se encuentra hospitalizada desde el domingo en el hospital Fajr Air Force.
Según denuncia de la ONG, su habitación está fuertemente custodiada por agentes de seguridad, por lo que no ha podido recibir visitas, ni siquiera por parte de su familia.
La periodista Maryam Lotfi, del diario Shargh, fue detenida mientras intentaba ingresar en la habitación de la adolescente en el marco de una investigación sobre el suceso, si bien fue liberada el lunes por la noche.
El Ministerio de Educación de Irán anunció en abril que expulsaría de los centros educativos a aquellas mujeres que no cumplieran con el código de vestimenta.
La nueva imposición de las autoridades iraníes se produce en respuesta a las protestas antigubernamentales que estallaron en septiembre de 2022.
Miles de personas se manifestaron para desafiar las estrictas normas impuestas por los ayatolás contra las mujeres después de que la joven Amini muriera en dependencias policiales tras ser arrestada por presuntamente llevar mal puesto el velo.
Medidas punitivas
Las penas por violar el código de vestimenta se endurecieron este 2023, luego de aumentar las condenas de cárcel de 2 meses hasta diez años y multas por unos 2 mil dólares; asimismo, existen castigos de hasta 60 latigazos por incumplir la ley implementada contra mujeres.
por Excelsior