Hallan en Groenlandia nueva subespecie de oso polar que no depende del hielo marino


Un equipo de investigadores de la Universidad de Washington, Estados Unidos, identificó en el sureste de Groenlandia una nueva subespecie de oso polar genéticamente aislada, que está adaptada de forma única a un entorno con acceso limitado al hielo, esto significa que estos osos no dependen de los hielos marinos para sobrevivir.

Este nuevo estudio es una recopilación de 30 años de datos históricos sobre la población de osos en la costa oriental de Groenlandia, además, también muestra la información recolectada durante 7 años en la costa suroriental, una región caracterizada por su geografía de difícil acceso y condiciones climáticas imprevisibles.

Los científicos monitorearon el movimiento y los hábitos de 27 osos y analizaron varias muestras de ADN que les fueron facilitadas por cazadores locales. Tras estos procedimientos, los investigadores determinaron que «la diferencia genética entre este grupo de osos que habita en el sur de la isla y su vecino genético más cercano es mayor que la observada en cualquiera de las 19 poblaciones de osos polares conocidas anteriormente».

De acuerdo con el estudio, las subespecies que están distribuidas en la mayor parte del Ártico dependen del hielo marino anual para capturar a sus presas, principalmente focas y otros mamíferos marinos, mientras que los osos del sureste de Groenlandia utilizan como plataforma de caza durante todo el año glaciares de escombro de agua dulce.

Los científicos han insistido en que es importante seguir estudiando a la especie del sureste debido a que las condiciones en las que vive son similares a las proyecciones climáticas en el Alto Ártico para finales del siglo XXI. «Los osos polares están amenazados por la pérdida de hielo marino debido al cambio climático. Esta nueva población nos da una idea de cómo podría persistir la especie en el futuro», explicó Kristin Laidre, coautora de la publicación.

Finalmente, los académicos explicaron que estos hallazgos muestran que los glaciares de terminación marina, aunque de disponibilidad limitada, tienen el potencial de servir como refugios climáticos para los osos polares, algo que anteriormente no se había reconocido.